Crema catalana
Este rico manjar está hecho de una crema pastelera más fina de lo normal que ha sido espolvoreada con azúcar quemada para darle el crujido y la dulzura que la caracteriza.
Ingredientes
- 8 huevo
- 1 litro de leche liquida
- La cáscara de un limón
- 200 gramos de azúcar blanca
- 30 gramos de maicena o almidón de maíz
- 1 rama de canela
- Azúcar adicional para coberturas
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Procedimiento
Empezaremos separando las yemas de las claras de los huevos. Solo se requieren las yemas para esta receta; las claras se pueden almacenar en el refrigerador para usarlas en otra receta (y consumirlas rápidamente).
Otro ingrediente que estará listo para usar es el limón. Retire la piel en tiras o lo más completamente posible con un pelador manual. El resto del limón se guardará para otra receta (pero mientras tanto, guárdelo en el refrigerador).
A continuación, combinaremos las yemas de huevo y el azúcar en un recipiente hasta que tengamos una pasta bien integrada.
Por otro lado, calentaremos la leche en una olla y añadiremos la piel de limón y la rama de canela. Reservaremos un poco de leche en una taza a la hora de verter la leche.
Lleva la leche a ebullición a fuego medio, revolviendo con frecuencia para evitar que se queme o se pegue a la superficie de la olla.
Al mismo tiempo, usaremos el resto de la leche en la taza para diluir la maicena. Así haremos la mezcla para que la maicena no forme grumos en el líquido. Después de eso, lo mezclaremos con el resto de la leche.
Una vez que la leche haya llegado a ebullición, retírala del fuego y desecha la cáscara de limón y la rama de canela.
Lo combinaremos enseguida con la pasta que hicimos antes, así como las yemas de huevo y el azúcar.
Una vez que todos los ingredientes estén bien combinados, regrésalos al fuego y cocina a temperatura moderada hasta lograr una consistencia cremosa. Para lograrlo, deberás batirlos continuamente con una espátula de madera, lo que irá espesando la mezcla poco a poco.
Retire la mezcla del fuego después de que haya alcanzado la consistencia cremosa requerida. Distribúyalo entre los recipientes para servir que usará. Es incluso mejor si tienes vasijas de barro tradicionales. Usar un solo molde enorme es otra alternativa.
Deje que su postre se enfríe a temperatura ambiente antes de ponerlo en el refrigerador. Después de eso, enfríelo durante unas horas para que se asiente.
Para servir la crema catalana, recubrir cada recipiente con una capa gruesa de azúcar y pasar rápidamente un soplete por encima, haciendo que el azúcar se queme o caramelice. Esto le dará a la superficie del postre su característico tono dorado.