Cómo hacer Rollitos de arrachera rellenos

Empiece precalentando el horno a 175°C (350°F). Esto es clave para garantizar que los filetes se cocinen uniformemente y mantengan su forma una vez enrollados.

Mientras se calienta el horno, salpimiente generosamente los filetes por ambos lados. Use las manos para untar el condimento. Mi experiencia me dice que el condimento penetrará mejor.

En un bol, mezcle las hierbas frescas, el ajo picado y el aceite de oliva. Unte los filetes con esta mezcla, que servirá como un lecho de hierbas sorprendentemente sabroso dentro del rollo.

Esparza finamente la mostaza de Dijon sobre la mezcla de hierbas. Dijon proporciona una profundidad de sabor que complementa muy bien la carne.

En un lado del filete, coloque uniformemente los pimientos, la cebolla y las hojas de espinaca en rodajas finas. Recuerde que el equilibrio es crucial; un relleno excesivo puede hacer que el relleno se derrame durante el proceso de horneado.

Espolvoree una cantidad generosa de queso rallado sobre las verduras dispuestas. El queso no sólo une los ingredientes sino que le da al rollo un hermoso sabor cremoso.

Enrolla bien el filete y sujétalo con palillos o átalo con hilo de cocina. Hazlo con cuidado para evitar que se derrame o se suelte el rollo.

Caliente un poco de aceite de oliva en una sartén a fuego alto. Añada los rollos de carne y dórelos por todos los lados, normalmente un minuto por cada lado. El salteado ayuda a retener los jugos y da al rollo un acabado apetitoso.

Transfiera los panecillos al horno precalentado y hornee durante unos 15-20 minutos, o hasta que alcancen el nivel de cocción que prefiera.

Una vez hechos, sáquelos del horno y déjelos reposar unos 5 minutos antes de cortarlos. Este periodo de reposo permite que los jugos se redistribuyan por todo el rollo de filete asegurando una porción húmeda y jugosa.

Corta, sirve y disfruta de esta obra maestra que has creado.