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Puches
De las recetas tradicionales de mi abuela que he tenido el placer de preparar, las puches tienen un lugar especial. No sólo porque su sabor y textura son únicos, sino también por las historias que me contaba mi abuela mientras las preparábamos juntas. Son ideales para los días fríos y me recuerdan a mi infancia en la sierra.
Ingredientes
- 200 g de harina
- 2 litros de leche
- 1 rama de canela
- 4 cdas de azúcar (o al gusto)
- 1 cdta de sal
- aceite de oliva
- Canela en polvo para decorar (opcional)
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Procedimiento
En una cazuela amplia calentar la leche a fuego medio con la rama de canela. Recomiendo que se utilice una cazuela de base ancha para favorecer una cocción uniforme y evitar que la leche se derrame.
Cuando la leche esté caliente (sin dejar que llegue a hervir), retira la rama de canela y añade la harina poco a poco, sin parar de remover para que no se formen grumos. Esta parte es crucial: debes ser constante y paciente, ya que el secreto de unas buenas puches es su textura suave y sin grumos.
Las puches son un postre sencillo y reconfortante que se disfruta especialmente durante los meses de invierno.
Sigue removiendo la mezcla a fuego medio durante alrededor de 15 minutos, o hasta que veas que se empiezan a formar burbujas en la superficie y la mezcla está espesa.
En este punto, añade el azúcar y la sal y sigue removiendo durante otros 5 minutos, aproximadamente. Es importante que pruebes la mezcla y ajustes el azúcar a tu gusto.
Sirve las puches en pequeños cuencos y rocíalas con un hilo de aceite de oliva. A mí me gusta añadir también un poco de canela en polvo por encima para intensificar el aroma, pero es opcional.